Nació en 1892 y murió en 1933.  Hijo de Rafael Cajiao y Georgina Pabón. Hombre excepcional de refinada cultura, fina pluma y gran erudición. Trascendió como poeta, polemista, demoledor, políglota, jurista. Dominaba el inglés, francés, latín, griego, alemán y español; por esta  razón su casa era el lugar de encuentro de los extranjeros que llegaban a Samaniego en busca de oro.

De su depurada poesía, podemos admirar la poderosa construcción del poema, de estirpe neoclásica, acompañada de una pausada estructura musical y soportada en una disciplinada pureza idiomática. No obstante el vigor de su arquitectura poética, siempre aludió a su entorno cotidiano, a su contexto social y cultural. De ahí que se trate de un poeta que dispuso su férrea formación universal a favor del desarrollo de una poética nacional.

 

Dejó un legado importante en el campo de la ensayística, la crítica y por su puesto la poesía.

 

En el año de 1988 se le rindió un homenaje póstumo  con la donación de  una placa conmemorativa  de la Casa de poesía Silva. Placa que ha quedado como testimonio de un merecido homenaje en honor a este destacado escritor